Documentar recuerdos de otras personas sería la premisa del trabajo. Fotografiar un espacio accesible solo por la memoria. Llegar, en primera persona, al lugar recordado por otro cuando el viaje físico para él se establece como imposible en su exponente más extremo. El impedimento va más allá del deseo ya que nos encontramos ante una falta de libertad corporal e institucionalizada.

El punto de inicio de la serie empieza con la colaboración de la Escuela del Centro Penitenciario de Albocàsser (Castelló II). Los alumnos que desean unirse al proyecto realizan una redacción en la que describen “un lugar recordado”. En muchos casos el escrito se limita a unas simples líneas, que posteriormente se amplían con una entrevista. El lugar a describir no tiene ningún condicionamiento emotivo previo, se deja total libertad, sin establecer premisa alguna. Con posterioridad se constata que la mayoría de los recuerdos se sitúan en la infancia-juventud y se caracterizan por estar cargados de sentimientos positivos, primeras vivencias y emociones únicas.

Y será desde el Centro Penitenciario donde se ponga en marcha el cuentakilómetros que nos dará la cifra kilométrica que separa al que recuerda con su recuerdo.

C.P. Albocàsser-Rio Tinto 870 Km.

C.P. Albocàsser-Gare du Nord, Paris (Francia) 1.298 Km.

C.P. Albocàsser-Escaleras del Cementerio a la Playa del Bojandillo, Torremolinos (Málaga) 786 km.

Esos 870, 1.298, 786… kilómetros se recorren en la mayoría de las ocasiones sin conocer el destino, convirtiéndose el viaje, a su vez, en una experiencia y cúmulo de recuerdos. Buscar el lugar exacto, documentarse, saber cómo llegar, adaptarse a la climatología y al tiempo que se dispone… Y una vez allí, intentar encontrar con imágenes lo que han descrito con palabras.

La producción de cada una de las piezas será un trabajo de carga y acumulación de los elementos de cada una de las fases anteriores. 768 Km se convierte en un recorrido físico de la descripción, mientras que en 870 Km la influencia de los museos de Ciencias Naturales, y el mismo sobre la minería de Río Tinto se deja ver en la distribución de las imágenes. Por último, 1.298 Km se nutre de los sentimientos del que llega a un lugar desconocido, sin saber nada, ni siquiera la lengua y mucho menos donde va.